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Propietarios de viviendas de alquiler

A la hora de embarcarse en poner una vivienda en el mercado de alquiler, los propietarios intentan buscar la fórmula para encontrar el inquilino perfecto, ese que pague las cuotas mensuales con puntualidad y sin problemas económicos y que además cuide el inmueble y cumpla el contrato sin dejar desperfectos importantes y con una convivencia armoniosa con los vecinos. ¿Existen inquilinos así?

Claro que existen, pero habrá más probabilidad de encontrarlos si seguimos unos sencillos consejos y tenemos la confianza de que encontraremos lo que buscamos:

Contar con la ayuda de un profesional

Será quien nos asesore y aconseje la mejor forma de poner la vivienda en alquiler, establecer un precio adecuado, seleccionar al inquilino, redactar el contrato de arrendamiento e incluso gestionarlo de principio a fin para hacer frente a cualquier tipo de complicación que pudiera ocurrir.

Selección previa del inquilino

Si el propietario quiere alquilar su vivienda a un cierto perfil de personas es importante saberlo. Hay personas que desean alquilar solo a parejas sin hijos, otros a estudiantes, otros a personas solas, etc. Es importante hacer un estudio previo de las características de la vivienda y la zona para enfocarnos en el tipo de inquilino que mejor encaja con el inmueble y después publicitarlo en los lugares adecuados.

 Anunciar la vivienda en el sitio adecuado

Existen numerosos portales inmobiliarios de reconocido para anunciar la vivienda en alquiler y llegar a un mayor público, pero hay que seleccionar cuidadosamente las páginas para dirigirnos al tipo de inquilino que queremos. El profesional inmobiliario le asesorará a la hora de redactar el anuncio y hacer las mejores fotos para que la persona que lo vea sepa perfectamente el tipo de inmueble que alquila.

El inquilino ideal

Encuentre al inquilino perfecto para el alquiler de su inmueble en Madrid

Primeras impresiones  

Una vez que han contactado los candidatos para ver el inmueble es importante observar el comportamiento del posible inquilino y su trato personal. Esto es algo importante, sobre todo a la hora de que cuide bien el inmueble. Alguien que transmita confianza y tranquilidad, que esté de acuerdo con el precio, que haya investigado previamente sobre la información aportada en el anuncio, o que lleve una vida ordenada, puede ser tan valorable como el hecho de que pague puntualmente la renta de la vivienda.

Desconfiar del inquilino perfecto

Los inquilinos que insisten en que son buenos pagadores y cuidadores del inmueble, nunca hacen fiestas y siempre han tenido trabajo estable suelen decirlo siempre cada vez que visitan un inmueble. Hay que desconfiar. Saben qué decir al propietario para que confíen en ellos. No hay que dejarse impresionar y conviene indagar antes de firmar el contrato precipitadamente.

Exigir estabilidad laboral

Es importante establecer una pequeña entrevista con los candidatos sobre todo para comprobar su solvencia económica. Para ello el profesional sabrá lo que solicitar al interesado enfocándose especialmente en su estabilidad laboral para garantizar los pagos. Los profesionales inmobiliarios saben cómo pedir referencias al inquilino para acreditar su reputación como pagador en otros contratos de alquiler anteriores, la posibilidad de disponer de nóminas, contratos de trabajo, etc. El inquilino suele desconfiar del tratamiento que se hará de esa información confidencial si la entrega a un particular. En este caso un buen gestor inmobiliario es clave para establecer una confianza mutua.

Fianza

Según la ley de arrendamientos urbanos (LAU) es obligatorio el depósito de una mensualidad de renta en el organismo competente de cada Comunidad Autónoma cuando se alquila un inmueble. De esta forma el propietario puede cubrir los costes de posibles desperfectos o impagos una vez que el inquilino abandone la vivienda a la finalización del contrato. También se le pueden pedir garantías adicionales como avales, etc. Por supuesto, la gestión del depósito de la fianza también es recomendable que lo hagan profesionales del sector por si hubiera cualquier contratiempo o conflicto entre propietario e inquilino.

Contratar un seguro de alquiler con un profesional

Actualmente hay seguros que incluyen garantía de cobro por impagos o desperfectos de consideración por parte del inquilino, así como cobertura jurídica en caso de desahucio junto a otros importantes beneficios. Hay diferentes pólizas en función de la protección que desee el propietario y las necesidades de su inmueble. La tranquilidad de tener un contrato de arrendamiento en manos de profesionales es algo que no tiene precio y los propietarios cada vez apuestan más por esta fórmula para el alquiler seguro de inmuebles.

Desde Renta Garantizada conocemos perfectamente las preocupaciones de los propietarios cuando llega el momento de seleccionar un inquilino apropiado para su vivienda y queremos ofrecer la mayor tranquilidad y confianza para llevar a cabo las gestiones pertinentes y alquilar el inmueble con las máximas garantías.